ÁNGELES VILLARTA Y OTRAS (MADRID)

DE LAS MUJERES QUE FUERON PIONERAS EN EL OFICIO PERIODÍSTICO NO SE ACUERDA NADIE. LA LISTA DE PERIODISTAS NINGUNEADAS NO SE ACABA NUNCA Y EL MARIDO DE UNA DE ELLAS, DE MANOLIS MARTÍNEZ ROMERO, ES EL CRONISTA OFICIAL DE LA VILLA DE MADRID, ENRIQUE AGUINAGA (MADRID)

Escritoras

Algunos periódicos han despachado la noticia de la muerte de Ángeles Villarta con un obituario de aliño. Otros, la mayoría, ni eso. Se va con una vida bien cumplida: a las puertas de los 105 años. O sea, de otra época. Por si eso no fuera suficiente para explicar el arrinconamiento, hay otros varios: mujer, de derechas, periodista, escritora y culta. O sea, una provocación.

En ABC, en «Madrid» y en «Arriba» hizo reportaje, crónica y entrevista. Ganó el Premio Fémina de novela. Fue amiga de Baroja. Recuperó una colección histórica, «La Novela Corta», y creó una editorial bastante disparatada, «Las gemelas», donde publicaron Jardiel Poncela y el propio Baroja, entre otros. Era asturiana. Pero podría ser gallega o andaluz o catalana o castellano-leonesa. Para el caso es lo mismo.

Como los de la Memoria Histórica no saben por dónde se andan y las feministas bastante tienen con estar cabreadas consigo mismas y con el género humano, hete aquí que de las mujeres que fueron pioneras en el oficio periodístico no se acuerda nadie. En Galicia no hable usted de la coruñesa Sofía Casanova, corresponsal de la Guerra Europea, cronista de la Revolución Rusa, escritora candidata al Nobel; ni de su paisana Mary Luz Morales, que fue directora de «La Vanguardia». Ni de María Luisa Durán Marquina. Ni de Agustina Álvarez. Son, como mucho, nombres de calles.

La lista de periodistas gallegas ninguneadas no se acaba nunca. En Ribadeo, donde su padre, José Martínez Pereiro, ejercía de maestro antes de ser director de «El Ideal Gallego» en los broncos años republicanos, nació Manolis Martínez Romero (Manolis Romero), la primera mujer licenciada por la antigua Escuela Oficial de Periodismo. Si la memoria no nos traiciona, fue redactora de «Arriba» y redactora jefe de programas de TVE. Su esposo, Enrique de Aguinaga, cronista de la Villa de Madrid, todavía sigue felizmente entre nosotros, con sus 98 años a cuestas.

Y si en Ribadeo nadie se acuerda de Manolis Romero, tampoco nos extrañaría que en Sarria se hubiesen olvidado de Rosa María de Oñate, que fue la primera mujer que en España dirigió, redactó y confeccionó un periódico. Ella solita. Desde la aristocrática «Villa Andrea».

No se trata de poner a prueba el cupo neuronal de que pueda disponer el arriba firmante, cada vez más escaso, cierto es. Pero sin grandes esfuerzos memorísticos le salen, además de las que aquí quedan anotadas, otras diez o doce periodistas gallegas merecedoras de algo más que la indiferencia y la desconsideración de sus paisanos. Juan Soto.

Fuente: https://www.abc.es/espana/galicia/abci-angeles-villarta-y-otras-201812021841_noticia.html

 

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