LA EPIDEMIA DE FIEBRE AMARILLA EN GIBRALTAR DE 1828 QUE TAMBIÉN LLEGO A SAX

POR VICENTE VÁZQUEZ HERNÁNDEZ, CRONISTA OFICIAL DE SAX (ALICANTE) 

Las epidemias del cólera morbo no fueron las únicas que asolaron Europa en el siglo XIX. La fiebre amarilla se dejó notar repetidamente a lo largo de la centuria. En la actualidad sabemos que el virus de la fiebre amarilla (coloquialmente conocida como fiebre del vómito negro) se transmite de persona a persona por medio de la picadura del mosquito hembra. Este transmisor intermedio se conoce como vector.

​El inicio de los síntomas, que puede variar de leve a grave, ocurre en las primeras veinticuatro horas. Los signos reveladores de la fiebre amarilla son la temperatura alta, pulso lento, dolor extremo, vómito negro y piel amarilla. Aproximadamente la mitad de los infectados morían en menos de dos semanas y los sobrevivientes recibían inmunidad de por vida al virus.

​En los primeros años del siglo XIX, las tierras alicantinas, incluida Sax, padecieron los efectos mortales de la epidemia de fiebre amarilla en 1804 y 1811.

​En 1828, la fiebre amarilla se propagó en Gibraltar. Las primeras noticias se conocieron el 1 de septiembre, con gran alarma en la población, por el regreso de la temida epidemia de vómito negro. Gibraltar ya había sufrido dicha enfermedad en 1804, 1810, 1813 y 1814. Como en otras ocasiones, desde España se ayudó a la colonia inglesa con alimentos para los más necesitados.

​En pocos días la noticia corrió por toda la Península, llegando también a Sax, que tomó sus precauciones, controlando las puertas, como vemos en las cuentas de propios de 1828:

“Treinta reales entregados a Juan Hernández, valor de una arroba de azeyte para la guardia en la puerta de esta Villa, en el tiempo de la Epidemia declarada en Gibraltar”.

Por desgracia, la epidemia llegó a España y sus efectos mortales en Sax los podemos observar en el aumento de las defunciones, especialmente en los años 1829 (100), 1830 (122), 1831 (144) y 1832 (108), con un gran saldo negativo en el crecimiento vegetativo. Además, la adversa situación se agravará en 1834 a la raíz de una oleada de cólera, que enlaza con la anterior epidemia y vuelve a ocasionar un fuerte saldo negativo.

FUENTE: https://saxdigital.com/la-epidemia-de-fiebre-amarilla-en-gibraltar-de-1828-que-tambien-llego-a-sax/

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