POR GABRIEL SEGURA HERRERO, CRONISTA OFICIAL DE ELDA (ALICANTE)

Antonio Gisbert lleva años recogiendo expresiones, testimonios orales y escritos del habla tradicional eldense. Aquella que hablaron nuestros abuelos y que la hipercorrección académica de las generaciones de nuestros padres e hijos ha ido laminando, difuminando y condenando a la extinción.

¿Quién no ha pronunciado alguna vez una palabra terminada en el sufijo -ico? o ha utilizado palabras que, aun no siendo exclusivas de Elda, las identificamos como propias de nuestra habla, caso de camal, trenque, llus, melsa, polsaguera, gobanilla, costera, potroso, legón, astral, remijón etc.

El amigo Antonio Gisbert nos descubrirá las influencias y rasgos aragoneses, valencianos, castellanos y murcianos que configuraron el habla eldense desde el siglo XVII hasta mediados del siglo XX. Todo ello con algunos testimonios orales de personas ya fallecidas que fueron entrevistadas por Emilio Gisbert Pérez, caso de Josefa Gil Payá (1904-2004) y que se constituyen en incunables joyas documentales de la historia de nuestra ciudad.

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