DEL ¡JESÚS! A LAS ALMEJAS EN SALSA VERDE
Nov 23 2014

POR JOSÉ ANTONIO FIDALGO SÁNCHEZ, CRONISTA OFICIAL DE COLUNGA (ASTURIAS)

10425183_721548081267084_4098207338962274726_n

10262218_721548327933726_3221952055421320543_n

Antiguamente, cuando la educación era buena y se enseñaban «normas de buena educación», era costumbre decir ¡Jesús! o ¡Dios le ayude! a la persona que estornudaba; y si se trataba de un niño la expresión era como «más mimosa»: ¡Santinos, grandes y pequeñinos!

¿Qué origen tiene esta tradición?

Desde tiempos muy antiguos se consideró al estornudo como «señal de desgracia e incluso de muerte cercana»; de ahí que ante tal «anuncio» se pidiese para el enfermo la ayuda de los dioses en pro de su salud o de su felicidad eterna.

Demos un salto en la Historia y vayamos a los mediados del siglo XIV, concretamente a 1348, cuando la tristemente famosa PESTE NEGRA, muerte negra o peste bubónica, llega a Europa y aquí «se instala hasta comienzos del siglo XVIII», causando más de 40 millones en la población europea.

Por eso, al ver estornudar a un afectado se solicitaba para él la inmediata ayuda de Jesús.

Por cierto, fue en el siglo XIX cuando los bacteriólogos KITASATO y YERSIN descubrieron la bacteria causante de esta dolencia. La bautizaron como YERSINIA PESTIS.

¿Cómo combatir medicamente a esta terrible pandemia?

Conventos y monasterios, poseedores de ciencia, optaron por el uso de AJOS (por alto contenido en aliina que, transformada en alicina, ejerce acción antibiótica y broncodiladatora); de PEREJIL (por su contenido en apiína es estimulante del apetito), de las ALMENDRAS (ricas en grasas insaturadas), del ACEITE y de la SAL, símbolos de nueva vida.

Así nació la llamada SALSA VERDE que, si no sanó a los enfermos de peste, sí ayudo a crear placeres de mesa acompañando a pescados y mariscos.

En Taramundi, y concretamente en el Hotel-Restaurante Taramundi, Chelo prepara así las ALMEJAS DEL EO en salsa verde: En una sartén con aceite sofríe ajo muy picado con una guindilla de cayena; añade después caldo de pescado, perejil machacado, una cucharada de harina y vino blanco; da todo unos hervores para que la salsa tome un ligero espesor e incorpora las almejas (previamente tenidas durante media hora en agua con sal), calentando a fuego medio-suave hasta que abran las valvas.

Se sirven de inmediato en cazuela de barro caliente.

Una advertencia: El ajo, el perejil, las almejas y la guindilla son alimentos y especias AFRODISÍACOS; pero, ¡ojo, no teman!, dan placer y NO SON PECADO.

¡¡A disfrutar!!

Add your Comment

Calendario

mayo 2025
L M X J V S D
 1234
567891011
12131415161718
19202122232425
262728293031  

Archivos

UN PORTAL QUE CONTINÚA ABIERTO A TODO EL MUNDO