
POR MIGUEL GALLEGO ZAPATA, CRONISTA DE SAN JAVIER (MURCIA)
Recibí la grata visita de mi antiguo amigo Alberto Sanz Peñalver, al. que conozco, yo diría que desde antes de que naciera, pues fui amigo de su padre, un gran caballero, Vicente Sanz Tovar, desde el año 1947 cuando como soldado voluntario de Aviación servía a España en la Academia General del Aire, y él llevaba la Oficina del Juzgado y, en cuanto a su madre, fuimos a la Escuela de Santiago de La Ribera.
Alberto, que trabaja en la Academia, sus horas libres las dedica a la música es un magnifico compositor, escribe la letra y las interpreta con esa voz cadenciosa de que Dios le ha dotado ¡oírle es una gozada!
Organiza orquestas, actúa como animador, lo invitan a televisión y me decía que ahora está ilusionado en tocar también el violín.
Quedó en mandarme la letra de su “Bolero a La Ribera” y aquí está y la voy a publicar para que todos la conozcan, pues estos Sanz Peñalver (son catorce hermanos) tan audaces para todo, son algo tímidos cuando de ponderar sus cosas se trata, y yo quiero que la aprendan todos, los de aquí, para vibrar de emoción oyéndola y cantándola y, para que los demás puedan comprobar la calidad y el gusto de nuestras gentes y las bellezas de la que disfrutamos.-
Escribir sobre la familia Sanz Peñalver, esa gente de tan buena crianza, es una de las cosas más serias y gozosas que puede hacer el cronista de un pueblo, mejor dicho, de una ciudad, pues hemos crecido mucho últimamente, somos ya más de 33.195.
Me dice que tiene compromisos hasta diciembre, no me extraña, ¡Alberto es un gran emprendedor!, ahora que tanta falta nos hacen, pero más que nada es un “loco por la música”.
Bolero a Santiago de La Ribera
Iba paseando el sol
lleno de luz y color
cruzando el Mar Menor
y conoció La Ribera.
De ella se enamoró,
le declaró su amor,
le regaló su calor,
su vida entera.
Fue hace más de un siglo ya,
fue en este hermoso lugar,
fué en La Ribera.
Quiero vivir
donde vive el cielo con el mar,
donde se oyen la brisa y la luna
con las olas cantar.
Quiero vivir
esas noches de calma y de paz
donde siempre es posible soñar
en Santiago de La Ribera.
Si no sabes dónde ir
y si quieres ser feliz
debes venir porque aquí
siempre es primavera.
Si quieres sonreir
si quieres llegar a sentir
si quieres volver a vivir
la vida entera.
Mira hacia el Mar Menor
que ocho “torres de algodón”
adornan el Paseo Colón
de La Ribera.
Quiero vivir
donde vive el cielo con el mar,
donde se oyen la brisa y la luna
con las olas cantar.
Quiero vivir
esas noches de calma y de paz
donde siempre es posible soñar
en Santiago de La Ribera.