Las cenizas del que fuera escritor y cronista oficial de la ciudad, Enrique Cerdán Tato, reposan desde ayer en el Jardín del Silencio del cementerio municipal. El traslado de las cenizas se realizó ante los familiares de Cerdán Tato, en un acto que contó con el alcalde en funciones, Andrés Llorens, quien alabó la figura del cronista, representantes de la Comisión Cívica para la Recuperación de la Memoria Histórica, miembros de la Corporación Municipal y de diversas entidades civiles, culturales y sindicales.