ANDRÉS MARTÍNEZ, CRONISTA OFICIAL DE PILOÑA Y SUBDIRECTOR DEL REAL INSTITUTO DE ESTUDIOS ASTURIANOS, EXIGE A LOS POLÍTICOS «RESPONSABILIDAD» Y «QUE VELEN POR EL PATRIMONIO ASTURIANO»
El Real Instituto de Estudios Asturianos (RIDEA) respaldará la protesta del próximo día 16 en favor de la iglesia de San Antolín de Bedón, convocada por una plataforma vecinal. El subdirector del RIDEA, ANDRÉS MARTÍNEZ VEGA, CRONISTA OFICIAL DE PILOÑA, manifestó ayer su «indignación» por la situación del monumento llanisco, en situación de absoluto abandono y por cuya conservación lucha desde hace más de un año un grupo de ciudadanos, mayoritariamente vecinos y veraneantes de la localidad de Naves de Llanes. Subrayó que entre los objetivos del RIDEA está velar e investigar el patrimonio asturiano, así como dar la «voz de alarma cuando ese patrimonio esté en peligro. Por eso el RIDEA estará presente en la concentración del día 16», avanzó MARTÍNEZ VEGA.
MARTÍNEZ VEGA fue rotundo al exigir a los representantes políticos que asuman su «responsabilidad» y su «obligación» de «velar por el patrimonio asturiano». Calificó de «vergonzoso» el estado del templo, declarado monumento nacional en 1931 y bien de interés cultural (BIC) hace unos treinta años, pero, en realidad, en estado de ruina.
«El patrimonio o se conserva o se destruye. Y si se destruye la situación es irreversible», señaló MARTÍNEZ VEGA, quien abogó por salir en defensa de la iglesia de San Antolín para no tener que lamentar «dentro de treinta años que ya no exista».
Aseguró que el actual es un «momento decisivo» para San Antolín de Bedón, pues el edificio «corre mucho peligro». Destacó que el templo, por sus especiales características, su volumetría y el enclave en que se ubica es «la joya arquitectónica de la comarca». Una «joya del románico que no debemos permitir que desaparezca».
En su opinión, el de San Antolín de Bedón es un «problema de dejadez», achacable a los representantes políticos. El CRONISTA DE PILOÑA y profesor de Historia subrayó que San Antolín de Bedón es un «claro ejemplo» de la «pedagogía benedictina» y parte esencial «de la historia de Asturias». «Ya solo el entorno natural en el que se ubica tiene una lectura histórica detrás muy profunda», añadió. «Es increíble que borremos de un plumazo nuestra memoria histórica, porque esto sí es memoria histórica», recalcó.
«Nuestros representantes tienen la obligación de responder de los cargos que ocupan» y de «cumplir con sus responsabilidades», entre las que destaca la de «velar por el patrimonio asturiano».
En cuanto al debate sobre la titularidad de la iglesia, que la Administración investiga desde hace años, MARTÍNEZ VEGA lo calificó de «tomadura de pelo», pues «por ley la titularidad es lo de menos, y la Consejería de Cultura tiene que obligar a los titulares, sean quienes sean, a conservar el bien. Me da igual que el dueño sea Pepe que Juan», exclamó indignado Martínez Vega, quien añadió: «la Consejería tiene que actuar, y que no nos enreden más con la titularidad».
El CRONISTA DE PILOÑA se refirió también a la Iglesia de Asturias: «aunque ya no sea suyo, fue un edificio sacro y debería mojarse», insistió. MARTÍNEZ VEGA se deshizo en elogios hacia San Antolín de Bedón, en especial por su estructura arquitectónica, que calificó de «muy singular» e «impresionante». Aseguró que es «una pena» que el edificio esté abandonado a su suerte y animó a «todos los asturianos» a luchar por este patrimonio común «para que no se nos vaya ahora».
La plataforma en defensa de la iglesia de San Antolín de Bedón recaba así un nuevo apoyo a sus reivindicaciones, tras el logrado de diferentes asociaciones, como «Hispania Nostra». La lucha de este grupo de vecinos y veraneantes, encabezado por la joven María de la Vega, ha conseguido reunir más de un millar de firmas en favor de la conservación del monumento. Una reunión que este colectivo mantuvo días atrás con un responsable de Cultura no sirvió para arrancar ningún compromiso a la Consejería.
Fuente: http://www.lne.es/ – Ramón Díaz