POR APULEYO SOTO, CRONISTA OFICIAL DE BRAOJOS DE LA SIERRA Y LA ACEBEDA (MADRID)
AL TOSTADERO. Agosto, calor en rostro y entre pecho y espalda. Agosto, augusto emperador de tierras, aires y aguas, a los que reduce a su mínima expresión. Agosto, ojo solar que nos hace ver todo de oro. Agosto, siesta y descanso merecidos (para algunos). Agosto agostador de mieses que se harán pan eucarístico de comunión entre todos iguales…Por San Lorenzo y la Asunción, un tostadero en ebullición. Y que llueva café. O whisky y sangría.
AL AGUA, PATOSOS. Porque mejor que otra cosa hacer, a remojarse por dentro y por fuera. A meter la cabeza en la mar salada y soleada. A olvidar las reticentes preocupaciones. A echarse panza arriba o panza abajo en un ir y venir de las olas. A gozar, que tal gozo no volverá en un año que se presume tormentoso, por la inestabilidad del trabajo más que nada. Y que nadie pague el pato haciendo el ganso.
A POR TODAS. Hay quienes van a por todas, las blancas y las negras, las rojas y las azules, las pintas y las verdonchas, pero eso no se puede mantener por mucho tiempo. Al final, hay que elegir, por voluntad propia o porque te lo exijan los que están sobre ti, que haberlos haylos y son demasiados Habrá que aguantar y resistir, como Mariano, míralo, sobresaliendo de un baño de masas…opositoras.
A TOMAR POR RETAMBUFA. Los que se han manchado las manos en la masa dineraria de los bancos y las cajas; los evasores de capitales; los mentirosos compulsivos; los “acampados” en televisión para mostrar sus vergüenzas, fobias y filias, y otros tales y cuales deshonrados y deshonestos…que se vayan a tomar por retambufa, expresión sonorizante y despectiva que le gustaba mucho repetir a Umbral.
ADIÓS, MUY BUENAS. Mejor que adiós, hasta luego, que nunca sabe uno lo que pasará y no se debe decir nunca jamás. Yo me voy ofreciendo por entregas. Con estas prosas veraniegas, que les van a dar que hablar a ustedes entre los suyos, les añado unas coplas carceleras para que las canten los que las tienen que “cantar” entre rejas barceneras o barcenaseras. Pero por “alegrías”, que queremos saber la verdad de las mentiras entera y no su mitad: “Un día me fui a Segovia y allí canté por demás; los ojos de mi morena no los podía aguantar. Estaba como una rosa empinada en el rosal. ¡Qué rosa la de aquel día. Nunca la podré olvidar!”.
A DAR A LA CAZA ALCANCE. ¿Y por qué no, San Juan de la Cruz bendito? El hombre lo primero que fue, fue cazador y pescador para subsistir. Por tanto, a la caza y a la pesca y a la repesca, que siempre se quedan aves buchonas, peces gordos y gajos de vid vinícola sin recoger, lo que es un desperdicio. Fatal. ¿Entendéis? Gracias.