POR JOSÉ ANTONIO FIDALGO SÁNCHEZ, CRONISTA OFICIAL DE COLUNGA (ASTURIAS)
Ayer un amigo lector nos ilustró en breve comentario sobre la relación concha de vieira (venera)-pila bautismal-bautismo.
Me van a permitir que lo complemente usando el comienzo del Génesis: «In principio creavit Deus coelum et terram. Terra auten erat inanis et vacua et spiritus Dei ferebatur super aquas» (La Tierra estaba inerte y vacía y el espíritu de Dios se manifestaba sobre las aguas).
Ese grandioso océano, según el antiquísimo «modelo de Universo», estaba por encima del propio firmamento, como así leemos en el «Cántico de los tres jóvenes Ananías, Azarías y Misael: «Benedicite, aquae omnes quae super coelos sunt, Domino» (Bendecid al Señor todas las aguas que están sobre los cielos»).
La PILA BAUTISMAL representa ese «mar primero» sobre el que «revoloteaba» el espíritu de Dios y, en cierto modo, simboliza la «re-creación» (la nueva vida) del bautizado que se baña en sus aguas.
Retomando la leyenda clásica del «nacimiento de Venus» (que ayer comentábamos), la Iglesia usó de la concha de vieira (venera) como «agente material» en el sacramento del bautismo para, con el agua, «re-crear» la nueva vida espiritual del bautizado.
Pero aún hay más: En sus primeros tiempos el Camino de Santiago llegó a entenderse como UN NUEVO BAUTISMO EN LA FE; otro motivo más para que la concha de vieira (venera) fuese emblema de peregrinaje jacobeo.
Bueno, pues después de tanto rollo de alimento espiritual, vayamos al alimento corporal preparando unas exquisitas VIEIRAS AL HORNO.
Les aconsejo esta fórmula cedida, por TERESA AMADO, del MESON DO ALBARIÑO, en O Santo (Nantes-Sanxenxo).
Se abren las valvas de las vieiras y, extraída la carne, se lavan muy bien eliminando una «bolsita negra» que tienen; se salan y rocían con un toque de zumo de limón.
Se disponen en la concha cóncava y se cubren con un sofrito hecho con aceite, cebolla picada muy fina, perejil, jamón muy picadito, sal, pimienta (al gusto) y un toque de pimentón. Se espolvorean con pan rallado y hornean durante unos 15 minutos.
NOTA
Algunos expertos aconsejan utilizar un poco de salsa de tomate antes del espolvoreo del pan; otros, como los miembros de la Academia de Gastronomía Gallega son contrarios a ese ingrediente.
No faltan quienes recomiendan aromatizar el sofrito con un chorrito de brandy o de un buen albariño como el DA OCA.- Ustedes verán.